Siempre tuve una tremenda debilidad por los tonos fríos, principalmente por los azules y purpuras...
Recuerdo que cuando estudiaba arte, me enseñaron a conocer los colores, y a llamarlos correctamente.
El clásico celeste comenzó a llamarse azul desaturado con blanco, el turquesa: cyam, y asi uno a uno se fueron transformando cada color.
Cuando somos niños todo es simple, veo a mi pequeño de tres años, y en su mágico mundo, el rosa es rosa, y no un rojo desaturado, a medida que crecemos el mundo cambia y se modifica, se complica y se crea un universo paralelo.
Sera por eso que me siento feliz cuando ilustro o pinto, en ese momento, mi verdadero yo, viene a mi mente, y puedo disfrutar de lo que mas amo, de mi arte, mi vida, de mis azules, turquesas, rosas y lilas..
Comenze a pintar mujeres hace casi un año y media, si bien vengo pintando desde que tengo 20 años, recién después de haber vivido una experiencia de vida muy fuerte, puedo decir que renací.